
Jueves 11 de abril, primera hora de la mañana, día lectivo, veinte alumnos del colegio tomábamos un autobús rumbo a la Universidad de San Jorge, veinte, eran también los minutos que tendríamos que estar en ese autobús esperando con ansia la llegada, no sabíamos muy bien lo que nos depararía la mañana.
Sabíamos que había que hablar en público, nos apuntamos para aumentar nuestra experiencia de la clase de debate de los últimos días, pero no sabíamos exactamente qué iba a pasar. En clase se nos propuso el tema de la Asamblea, “ Deberían las administraciones públicas financiar a las personas con conductas de riesgo?”, a partir del cual, se nos dieron unas resoluciones a las que nosotros tendríamos que plantear unas enmiendas explicando nuestras propuestas.
Cuando llegamos, entramos en el aula Magna de la Universidad, éramos los primeros, daba un poco de respeto imaginarte hablando con la sala llena. Pasaron los minutos y la gente iba entrando al aula. Cuando se llenó, comenzó la asamblea, en ella primero la comisión, encargada de la organización, hizo la introducción y al acabarla, comenzó el turno de las enmiendas, para nuestra sorpresa sonó el nombre de nuestra compañera Alexandra, ella hizo una propuesta constructiva que fue aprobada con mayoría absoluta. Minutos más tarde, tocaba la segunda enmienda elegida, y de pronto escuché mi nombre, me levanté, fui al atril y expuse mi trabajo con cierta temeridad, pero conforme pasaba el tiempo me iba confiando. Llegó el turno de la votación y mi propuesta fue aceptada también con mayoría absoluta. Nuestros compañeros también participaron de forma activa haciendo reflexiones y preguntas al tema que se planteaba.
Este modelo nos sirvió para practicar nuestras habilidades defendiendo nuestras ideas con argumentos y también, para aumentar nuestro conocimiento sobre el sistema de modelo parlamentario que a veces desconocemos tanto. Ha sido un experiencia maravillosa.
Luis Miguel Reguera
4º C ESO